El Premio Planeta de Novela 2017 Javier Sierra ira a la fallecida escritora británica Doris Lessing. Por eso, su novela El fuego invisible comienza con un párrafo bellísimo de la Premio Nobel en su discurso de recepción del galardón: “… el patrimonio de nuestros relatos surge del fuego, la magia y el mundo de los espíritus. Y ahí es donde aún se conserva…” De allí que la novela ganadora de uno de los más codiciados reconocimientos del mundo iberoamericano sea, además de una aventura documentada detrás del Santo Grial, un tributo al arte de narrar.
El fuego invisible es la historia de David Salas, un profesor de lingüística del Trinity College de Dublín que un día viaja a Madrid y toma o con el eco de sus antepasados españoles. En concreto, se cruza con una amiga de su abuelo escritor, que tiene una especie de club elitista de literatura donde se discute en forma acalorada sobre la primera novela moderna de la historia, que es El cuento del grial, de Chrétien de Troyes.
“Este autor fue un trovador que, en 1180, utilizó por primera vez la palabra Grial para referirse a un objeto sobrenatural, sagrado, sin decir que fue el que utilizó Jesús en la última cena. Lo curioso -y esto es real e histórico-, es que Chrétien de Troyes describe al Grial como un cuenco del que sale una luz sobrenatural y es sostenido por una doncella. Esa imagen fue pintada en 1123, en uno de los ábsides romanos más famosos de la historia -el Pantocrator de San Clemente de Tahull-, que es muy célebre. ¿Cómo se pintó el Grial en España 57 años antes de que Chrétien de Troyes escribiera sobre ello? Ese enigma empuja a mi protagonista a una aventura con un final sorprendente”, cuenta Sierra con un entusiasmo desbordante.
-El misterio lo atrapa. En su juventud perseguía ovnis y en su reciente novela, va en busca del Grial.
-Es verdad. Dediqué una parte de mi juventud a perseguir estos grandes enigmas; lo hice con las herramientas del periodismo y con la licencia para preguntar e indagar. Pero ese tipo de periodismo no alcanzaba casi nunca una respuesta definitiva para las grandes preguntas de la existencia. Por eso salté a la literatura: para encontrar respuestas. La literatura es el maravilloso camino que permite hallar soluciones a grandes interrogantes, para los cuales no alcanza la razón.
-Pero además su novela rinde un homenaje a la literatura.
-Es así. Allí está el abuelo que fue escritor, la amiga de su abuelo que también lo es. Es tan importante la búsqueda de la copa de la última cena, como la invención de la palabra Grial. Vivimos en un mundo donde hemos inventado muchos términos que han modificado la historia de nuestra civilización. Y también es un homenaje a Doris Lessing, maravillosa escritora del siglo pasado que tuvo mucho vínculo con lo mágico, lo misterioso, lo invisible… asociaba el fuego de nuestros antepasados con la gran inspiración para contar historias. Y es cierto, la invención del fuego permitió que nos reuniéramos a su alrededor a contar leyendas e historias, misterios, y ese es el origen de la literatura. Desde el título, la novela rinde homenaje a ese fuego.
-¿Se considera un experto en las palabras como su protagonista dice">