Quitar las hojas externas de los alcauciles y, con un cuchillo afilado, tornearlos hasta dejar únicamente el corazón. Rociarlos con abundante jugo de limón para que no se pongan oscuros o sumergirlos en un bol con agua y jugo de limón.
Paso 2
Colocar agua y sal en una olla. Hidratar la harina con 1 taza de agua y sumarla a la cacerola. Incorporar los corazones de alcaucil y llevar al fuego. Cocinarlos 20 minutos. Cuando estén tiernos, dejarlos enfriar dentro de la misma agua.
Paso 3
Escurrirlos, abrirlos un poco y, con una cucharita sacar la pelusa interior. Dejarlos enfriar por completo.
Paso 4
Colocarlos en una fuente, rodearlos con hojas de lechuga bien frescas, Cortar el jamón crudo en juliana y sumarlo a la fuente, intercalándolo con las nueces picadas.
Paso 5
Aparte, batir la crema de leche hasta que llegue a tres cuartos de punto. Incorporar el vinagre y la ciboulette picada. Distribuir la salsa de crema sobre los corazones de alcaucil y servir.